Anda abre la puerta y deja pasar el aire,

ya te queda poco para acercarte,

no me beses en el cuello más bien no por ahora.

Desde luego las horas con tu presencia me encandilan,

eres la guinda de mi cuadro abstracto cantado con poesía,

eres el indice y el prologo de lo más fugaz que a podido retenerme en esta vía.

Gracias por las intersecciones que creas en mi corazón en plano oculto.

Infinidades, calamidades y respuestas es lo que exige la mayoría de la gente al ver que eres tan descompuesto como animado.

Desenvolvías una serie de capítulos que alegran a cualquiera, eres una especie de Epi buscando un San Blas que le ayude a curar sus pecados para aguantar un poco mas en esta marea.

Dime firme marinero ¿ a que temen las sirenas?

No entiendo como no te han arrastrado aún al fondo del mar y sigues sosteniéndote en ese barco.

¿ Así es por quien me tomas? Por un barbudo despiadado,

que te arrancaría antes los besos que la sangre,

menudo par , menuda escalera, que color de vida brisa marinera.

Siempre pido deseos, deseables, espontáneos y eficaces,

este año no se bien si seguir con mi jerarquía de síndromes que me provocan inseguridades o dejar que este año se alargue sin pedirle nada a nadie.

Gracias por ponerme arena sobre la espalda, por cubrirme la mirada con tus rayos de sol y ante todo pequeño y despiadado marinero, nunca te he temido porque los hombres con barba sois demasiado amables.